Ponerse Cerca de Dios

¿Cuál son los obstáculos de ponerse más cerca de Dios? Creo que hay muchos. Por ejemplo, hay los impedimentos decribidos por Jesús en la parábola de las tierras. Los impedimentos de recibir la palabra están los mismos de los que evitarnos relacionar con Dios: entusiasta a la empieza pero detenido por turbación y perplejidad, vergüenza, estrangulado por preocupaciones y cuidados, tentado por nuestros deseos, pasiones, y lujurias, no vayamos nunca a él para ser salvado de los mismos - pueden ser tan apetecibles que no tenemos la voluntad de correr afuera, hacia los brazos de Dios, las manos clavados de Jesús. En corto, podemos considerar que nuestro orgullo; las delicias de vida; fama, gloria, y simple popularidad; dinero y fortuna, deseo para ser independiente y hacer nuestros propios decisiones hay los categorias de obstáculos que prevenirnos venir a Dios. Y si no venemos a Dios, no nos ponemos cerca de Él. Por como se dice en Hebreo 11:6, ¨porque es necesario que el que se acerca a Dios crea que El existe, y que es remunerador de los que le buscan.¨

Detrás de este es la razón que hemos hecho alguna otra cosa nuestro Dios en vez de Jesús Cristo. Hay muchas maneras en que alabanzamos otras cosas. Pero la línea bajo es que no creemos que Dios es capable, o sabe bastante o igual que nosotros, o tiene nuestro lo mejor interés en su mente (al menos, no tanto que nosotros sabemos nuestro propio interés). Y este falta de confianza contiene el miedo que Él no va a cumplir nuestros deseos y intereses. Entonces, no le confiamos a Dios con las cosas que son más importante a nuestros corazones. No obstante, nos ponemos en marcha para coger lo que nos parece más valoroso. Sino Dios, Jesús, es más valoroso.

¡De mi saca el mundo sino me da Jesús! ¿Y por qué? Porque si Jesús lo hecho todo (y Él hizo), si Jesús sabe todo y exactamente lo que necesitamos (y Él hace), si Jesús tiene todo del poder , es todo poderoso (y Él es), si Jesús siempre hace lo que es correcto, bueno, justo, y honrado (y Él hace), y finalmente si Jesús nos ama, nos agapa (y Él nos ama totalmente, completamente, sin reservación)...

Entonces podemos ser seguro que podemos acercarle en confianza que Él va a perdonarnos cuando confesar nuestros pecados y fracasos, recibirnos y aceptarnos, quedar con nosotros como el Espíritu Santo que le da a todos que confie en Jesús, quien es Dios en la carne, el cuerpo, quien nació y vivió en medio de nosotros y nuestro mundo, que nos dijo la verdad y hizo muchas curas por milagros maravillosos, fue matado en una cruz por nuestros, recibir en su cuerpo la penalidad por nuestros pecados, y entonces fue confirmado por Dios por la resurrección de su cuerpo de la muerte.